Abrazada por mar y marismas, Noja es un crisol en el que se funden la tranquilidad de sus espacios naturales, que constituyen el 75% del total del municipio; su variada gastronomía, presidida por la nécora que recorre infatigable sus interminables playas; sus increíbles amaneceres y puestas de sol, y numerosas oportunidades de deporte y ocio.
Su ubicación privilegiada, en la costa oriental de Cantabria, a 45 km de Santander y a poco más de 70 km de Bilbao, permite al viajero además acercarse a lugares emblemáticos como las Cuevas de Altamira, el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, el Museo Guggenheim o la Cueva de El Soplao.
Un destino, en definitiva, con múltiples atractivos para desconectar de la rutina durante las cuatro estaciones del año.